*El Decreto que establece que constructoras que laboran en la Refinería Dos Bocas, Tren Maya y Aeropuerto Santa Lucía no suspenderán actividades, evidencía su irresponsabilidad y falta de compromiso.
Al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, no le importa la grave crisis que enfrenta el país en materia de salud por la pandemia del Covid-19, ya que lo único que le interesa es dar continuidad con la construcción de sus megaproyectos como la Refinería Dos Bocas, Tren Maya y el Aeropuerto Santa Lucía, entre otras obras, advirtió la Dirección Nacional Extraordinaria (DNE) del Partido de la Revolución Democrática (PRD).Ello, pese a las exigencias ciudadanas de que dichos recursos destinados a esas obras se redireccionen para combatir este virus que en México -al momento- ha cobrado 125 vidas, señaló la dirigencia.
El descontento se agudizó luego de que se publicara en el Diario Oficial de la Federación un Decreto en el que se establece que empresas de acero, cemento y vidrio que tengan contratos para estas obras, deberán mantener sus operaciones para cumplir con los compromisos a corto plazo, esto pese a la contingencia y a las recomendaciones de suspender toda actividad no esencial, tal como lo estableció su propio Gabinete de Salud.
En ese sentido, los integrantes de la DNE consideraron que además al Ejecutivo Federal no le interesa la salud de miles de trabajadores y trabajadoras de dichas obras, quienes estarán en riesgo latente de contraer el virus que ha cobrado miles de vidas a nivel internacional.
Insistieron que, como parte del rescate económico, el Gobierno Federal debe cancelar dichos proyectos, los cuales desde un inicio no contaban con sustentos legales ni ambientales para que se llevaran a cabo.
Consideraron que López Obrador debe de dejar a un lado sus intereses políticos y electorales, para enfocarse en la salud y el bienestar de millones de mexicanas y mexicanos que están en riesgo y que padecen la grave crisis que enfrenta el sistema de salud en el país.
Finalmente, reiteraron que no es suficiente con recortar salarios ni quitar aguinaldos, derechos laborales, así como la promoción de sus programas sociales, sino que se debe de implementar una estrategia certera para aminorar los impactos económicos que ha generado la pandemia del Covid-19.
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