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Jurgen Todenhofer, el primer periodista occidental al que permitieron entrar en territorio controlado por el Estado Islámico en Siria cuenta su experiencia de 10 días pasados con los yihadistas y explica tanto el ambiente que se vive entre los extremistas como los métodos para combatir al terrorismo.
Tras seis meses de conversaciones por Skype con el movimiento yihadista del Estado Islámico, al periodista alemán Jurgen Todenhofer se le permitió vivir 10 días junto con los terroristas y visitó Raqa, la autoproclamada capital del 'califato', informa el periodista en una entrevista a RT.
Después de pasar varios días con milicias del EI, de tener largas conversaciones con ellos y de observar su vida diaria, el periodista alemán afirma que "no les importa que les llamamos terroristas".
El ambiente en el territorio controlado por el EI
Las calles de Raqa están llenas de gente, coches y empresas en funcionamiento. La vida parecía ser completamente normal, indica Todenhofer y agrega que hay que tener en cuenta que los islamistas han matado o expulsado a todos los chiítas y cristianos, por lo que las únicas personas que viven allí son sunitas.
"Si usted comete un error, puede ser asesinado", declaró Todenhofer, recordando a gente que ha sido castigada con penas de cárcel por delitos como una visita a una novia o el uso de pastillas para dormir, que están prohibidas. "La gente sabe que es peligroso", añadió.
No hay muchas mujeres en las calles de Raqa, hay pocas y están completamente cubiertas con velos. Solo las mujeres de edad muy avanzada no tienen que llevar un velo, recuerda el periodista alemán. "Porque si ya no son lindas, se les permite mostrar su cara", explicó.
¿Por qué la gente se une a los terroristas?
Todenhofer cuenta a RT que en el territorio de los terroristas, conoció a personas del Cáucaso (Rusia), de Alemania, Francia y Reino Unido.
Durante su visita, el periodista tuvo la impresión de que todos los musulmanes que se unieron al EI no eran importantes en sus países, que no eran aceptados allí y que eran considerados como ciudadanos de segunda clase. "Se les dice que en el Estado Islámico van a participar en una lucha histórica, una lucha final entre el bien y el mal", continúa.
"Esos jóvenes que no eran importantes en sus países serán muy importantes [aquí]. Y por primera vez en su vida, alguien les dice que son importantes", recalca el periodista. Los extremistas aseguran a los jóvenes que van a ser estrellas y verdaderos héroes, que tendrán un Kaláshnikov y lucharán contra los estadounidenses.
Se les dice que en el Estado Islámico van a participar en una lucha histórica, una lucha final entre el bien y el mal
"Se someten a un lavado de cerebro, por supuesto. Es una combinación muy exitosa de fanatismo y de un entrenamiento militar muy inteligente que obtienen de exoficiales de Sadam Husein", afirma Todenhofer y agrega: "Ellos piensan que juegan un papel muy importante".
Para los jóvenes europeos que se unen al Estado Islámico, el camino de vuelta está cerrado, ya que los que quieren regresar a sus hogares son considerados como traidores que deben ser asesinados. Además, aquellos que creían que iban a luchar contra las tropas estadounidenses y británicas se han dado cuenta de que en realidad están matando a musulmanes inocentes.
¿Cuál es el motivo por el que matan a los rehenes?
El periodista cree que los terroristas matan a rehenes como periodistas estadounidenses inocentes para sembrar el miedo y provocar que Washington envíe tropas terrestres al campo de batalla de Siria, porque quieren luchar contra los estadounidenses. "Creo que ahora les gustaría también luchar contra las tropas terrestres rusas, ya que quieren luchar contra gente poderosa", expresa.
¿De dónde consiguen las armas, las municiones y el dinero?
Naturalmente, los milicias no dijeron todo al periodista, pero Todenhofer tuvo la impresión de que El Estado Islámico sigue recibiendo dinero y armas desde monarquías del golfo como Arabia Saudita.
Además, las armas se compran en el mercado negro, donde las armas fabricadas en Europa están disponibles, así como las suministradas a combatientes kurdos Peshmerga o al Ejército Sirio Libre (FSA por sus siglas en inglés), sostiene Todenhofer.
Los yihadistas informaron al periodista que "incluso si no conquistamos estas armas, podemos comprarlas, porque todo tiene un precio. La mayor parte de nuestras municiones las obtenemos del Ejército Sirio Libre ".
Las tácticas de los extremistas
Los terroristas utilizan tácticas de guerra de guerrillas, por lo que bombardearlos es una tarea difícil, ya que se dispersan cuando el peligro se acerca, advierte el periodista.
"Yo no puedo juzgar al Ejército ruso, pero puedo juzgar a los ejércitos occidentales. La Marina estadounidense y las fuerzas especiales no tienen ninguna posibilidad en la lucha contra los guerrilleros, porque estas milicias están dispuestas a morir, mientras que la Marina de EE.UU. no quiere morir", destaca Todenhofer.
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