En México, los investigadores del Instituto Politécnico Nacional (IPN), descubrieron una nueva esperanza en la lucha contra el cáncer.
María del Consuelo Gómez García, investigadora del Instituto Politécnico Nacional, indicó que por la necesidad de esta enfermedad, la incidencia que tiene es muy alta y por la gran riqueza que tenemos en nuestro país de plantas medicinales y el conocimiento ancestral, encontraron en el municipio El Cardonal en Hidalgo, una planta llamada aranto que muchos de los pobladores utilizan como una alternativa para tratar algunas enfermedades.
“Yo vi a mi tía que curaba las heridas con esta plantita, este era mi chile anchillo y se aliviaban las personas las heridas, hasta los animales curaba. En la mera cumbre del cerro ahí está la plantita”, externó Juan Gómez, agricultor.
“Nos refirieron los pobladores que es lo que les daban para el tratamiento del bulto de pecho”, dijo la investigadora Gómez García.
Una vez en el laboratorio, la planta aranto fue sometida a un proceso químico para obtener los elementos esenciales, se lava, se tritura, se coloca con agua y se hace el proceso de hidrodestilación, que es a través del cual se obtienen los aceites esenciales.
Luego de siete años de investigación, los primeros resultados arrojaron que la planta de aranto o la doradilla puede matar las células cancerígenas.
Según María del Consuelo Gómez García, el aceite esencial elimina, sí mata a las células tumorales y no a las células normales. El aceite va exactamente dirigido en más de un 90 por ciento hacia las células tumorales.
De esta manera, el equipo de investigación conformado por profesores y alumnos de maestría y doctorado del Instituto Politécnico Nacional continua con las pruebas y esperan obtener resultados satisfactorios para utilizar este proceso en el tratamiento contra el cáncer.
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