En México, 128 empresas fueron sancionadas por la Procuraduría Federal del consumidor (PROFECO), principalmente por no despachar litros y kilos completos, no exhibir precios, no respetar el precio exhibido y vender cilindros que no cumplen con las medidas mínimas de seguridad, durante enero y febrero del 2017.
Informó la dependencia que el personal de campo de la institución ha permitido la verificación de 521 camiones repartidores de cilindros, 185 pipas para la venta de gas en tanques estacionarios y 216 plantas distribuidoras de gas LP.
En el caso de los camiones repartidores de cilindros, sancionó a 97 empresas y colocaron 583 sellos de inmovilización; detectó además que en algunos casos no se entregaban comprobantes o notas de compra y se ofrecían cilindros en malas condiciones.
La PROFECO verificó 185 pipas para la venta de gas doméstico en tanques estacionarios, de las cuales 4 fueron inmovilizadas por irregularidades en sus mecanismos de despacho y no exhibir el precio de venta reportado por los distribuidores ante la Comisión Reguladora de Energía (CRE).
En el primer bimestre de 2017, la PROFECO también inspeccionó 216 plantas distribuidoras de gas LP, de las cuales 31 fueron sancionadas con la imposición de sellos de inmovilización a cilindros y pipas, principalmente por incumplir con el peso ofrecido y no contar con instrumentos de despacho bien calibrados.
En dichas instalaciones se verificaron 2,577 básculas para el pesaje de cilindros y se inmovilizaron 35 de estos instrumentos de medición por despachar kilos incompletos.
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