El ataque, ordenado poco antes de las 9 de la noche del día de ayer viernes 13 de abril de 2018, se ha derivado como reacción del “supuesto empleo de gas cloro” contra la población civil de Duma en Siria, tomando esta supuesta acción como desafío ante la prohibición de usar armas químicas.
Este ataque “conjunto” sin la aprobación del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas se ha dirigido a puntos específicos como a un centro de investigación cerca de Damasco, así como a un almacén y a un puesto militar en Homs.
El pasado 3 de abril, Donald Trump expresó públicamente su deseo de abandonar el conflicto en Siria y repatriar a los cerca de 2 mil soldados desplegados en ese territorio, sin embargo, la operación del día de ayer viernes 13 de abril, aumenta la implicación de los Estados Unidos en el conflicto.
El Gobierno del Reino Unido, a través de su primera ministra Theresa May, mencionó que se ha tomado la decisión de involucrar a las fuerzas armadas británicas para no permitir la normalización del uso de armas químicas en Siria, o en cualquier parte del mundo.
Emmanuel Macron, presidente de Francia, recalcó que, ni París, ni sus aliados, pueden tolerar la banalización del uso de armas químicas, y que su participación busca limitar la producción y uso de este armamento por parte de Siria.
Por otra parte el embajador de Rusia en los Estados Unidos, Anatoly Antonov, ha criticado la decisión de los Estados Unidos de atacar Siria junto a Francia y el Reino Unido, y ha advertido que esta decisión "tendrá consecuencias", Rusia ha convocado a una reunión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
Irán ha advertido a los Estados Unidos y a sus aliados, de las consecuencias regionales de su bombardeo, siendo condenado por el Ministerio de Exteriores iraní, y denominado como una agresión tripartita.
El secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, ha hecho un llamado a la moderación, mientras que la Organización del Tratado del Atlántico Norte ha mostrado pleno apoyo al ataque, ante la violación por el uso de armas químicas que viola las leyes y los acuerdos internacionales.
Expresamos nuestra preocupación ante la posible escalada del conflicto y lamentamos las muertes de los ciudadanos sirios, así como los desplazados que han provocado estos siete años de guerra.
Recalcamos que la vía militar no es la alternativa, y pugnamos a que se utilice la vía del diálogo, la diplomacia y la asistencia humanitaria ante la crisis dentro del territorio sirio.
Demandamos al gobierno de México hacer un llamado a la comunidad internacional para que la solución del conflicto se dé en el seno de la ONU, se paren las hostilidades militares y hacer un llamado para la No utilización de la fuerza militar para la solución de controversias internacionales.
José Irán Moreno Santos
Secretario de Relaciones Internacionales
Partido de la Revolución Democrática
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