Deberán pasar por el filtro del Instituto Nacional de Migración (INM) todos los connacionales que sean deportados de Estados Unidos a México en el punto de repatriación entre México y Estados Unidos, en Tijuana, Baja California.
Personal del INM solicita documentación que avale como mexicanos a las personas deportadas. En caso de que no cuenten con estos papeles, los agentes del Instituto les aplican una serie de preguntas para corroborar su nacionalidad.
“Les hacemos unas preguntas en el punto de repatriación, estas preguntas consisten en allegarnos de los medios de convicción necesarios para acreditar la nacionalidad mexicana, hay medios de convicción, hay lenguajes, hay modismos del hablado, hay referencias geografías, biografías y familiares, de dónde vienen, de los lugares específicos del país que nosotros podamos tomar como elementos de convicción para acreditar su nacionalidad”, explicó Rodulfo Figueroa Pacheco, delegado del INM en Baja California.
El Gobierno mexicano no recibirá personas deportadas que no sean mexicanos.
“Nosotros no recibimos a esas personas, la autoridad migratoria mexicana no recibe a esas personas en el punto de repatriación, se toma la determinación de que si la persona no acredita ser mexicano, no puede ser admitido en nuestro país”, dijo el delegado.
Las autoridades del INM en Tijuana, aseguran que por este punto, el Gobierno de Donald Trump no ha intentado deportar personas de nacionalidad distinta a la mexicana.
“En este mes que llevamos operando en este punto de repatriación, es decir en Baja California, no hemos devuelto a una persona de las que nos ha traído la autoridad norteamericana en calidad de repatriados”, afirmó Rodulfo Figueroa Pacheco.
En este año han sido repatriados 20 mil 997 personas, a comparación de de 2016, que fueron deportados 219 mil 596 mexicanos. A todos les aplicaron un formulario para comprobar su nacionalidad.
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