Exponerse a la radiación solar por periodos prolongados puede provocar daños irreversibles a la salud, e incluso la muerte, según Alejandro Velasco Medina, jefe de Unidad del Hospital General de México.
Comentó que el golpe de calor es una condición que puede poner en riesgo la vida; provoca lesiones renales; sí es una condición que puede dejar secuelas; se presentan calambres musculares por la destrucción muscular; y pueden producir convulsiones.
En algunos casos puede iniciar con síntomas como sed excesiva, dolor de cabeza, enrojecimiento de la piel; si no se atiende, se puede padecer confusión o pérdida del conocimiento, vómitos frecuentes, falta de aire y problemas para respirar.
Los niños menores de 5 años, las personas con enfermedades crónicas y los adultos mayores, tienen más riesgo de presentar un golpe de calor; también quienes no están acostumbrados a las altas temperaturas.
Algunas medidas para prevenir el golpe de calor son hidratarse constantemente, evitar realizar ejercicio o actividad intensa al aire libre entre las 11 de la mañana y 3 de la tarde, vestir ropa ligera, clara y de algodón que permitan la transpiración, permanecer en lugares ventilados, comer frutas y verduras y ante cualquier síntoma, acudir al médico de inmediato.
Con el golpe de calor el cuerpo alcanza temperaturas superiores de 39 grados
El golpe de calor se presenta cuando el organismo, enfermo o no, alcanza temperaturas de 39 a 41 grados, provocando que las personas expuestas no puedan controlar el calor normal de su cuerpo y pierdan la capacidad de sudar.
Esta condición también puede provocar salpullido, irritación, principalmente en cuello, axilas, pliegues de piernas y brazos, o enrojecimiento de la cara, deben acudir a los servicios de Urgencias de sus Unidades de Medicina Familiar para recibir tratamiento oportuno y adecuado.
Si se viaja en automóvil, es importante mantener los vidrios abajo y no dejar dentro del vehículo a menores de edad ni a personas de la tercera edad.
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