La tarde de este miércoles, un grupo de presuntos partidiarios del Gobierno venezolano de mayoría opositora, entraron por la fuerza a la Asamblea Nacional (AN, Parlamento), causando heridas a algunos diputados que se encontraban en el recinto, para una sesión en conmemoración del Día de la Independencia de ese país.
El parlamentario opositor José Manuel Olivares, confirmó a través de Twitter "Urgente!! Grupos paramilitares entran a la AN! Diputados heridos! En las fotos @ArmandoArmas".
En su mensaje, Manuel Olivares, compartió dos fotos en las que se encontraba el diputado, Armando Armas, con sangre en la cabeza y parte de su camisa.
Posteriormente, el grupo de cerca de 30 personas violentas que entraron en la Asamblea, fueron expulsadas por la seguridad de esa Cámara.
De todas estas personas, muchas iban vestidas de rojo y armadas con palos y artefactos pirotécnicos, éstas asaltaron la sede del Legislativo durante una sesión conmemorativa de los 206 años de la independencia venezolana, celebrada por los opositores que controlan la Cámara.
Los asaltantes ingresaron hasta los jardines de las instalaciones, arremetiendo contra todos los presentes.
Los hombres, que se identificaron como afectos al chavismo, robaron y golpearon con palos a varios periodistas, asistentes y legisladores que se encontraban en el lugar, que se mantuvo rodeado por varios minutos.
El presidente de la Asamblea Nacional, el opositor Julio Borges, reportó a al menos a cinco diputados heridos, entre ellos los parlamentarios, Juan José Molina, Armando Armas, Américo de Grazia, Richard Blanco, Juan Guaidó, además de otros siete trabajadores del Parlamento agredidos.
La cuenta en Twitter de la Asamblea Nacional, reportó también agresiones a los diputados Luis Carlos Padilla, Leonardo Regnault y Nora Bracho.
Aunque los manifestantes fueron desalojados del lugar al poco tiempo por los miembros de la Guardia Nacional, responsables de la seguridad del recinto, las entradas y salidas de la Cámara, permanecieron tomadas por los supuestos oficialistas.
El fotógrafo de la Agencia EFE, Cristian Hernández, fue despojado de su equipo de trabajo y agredido por el grupo violento, al igual que otros reporteros en el lugar.
Los opositores, responsabilizan al cuerpo militar que custodia el Palacio federal legislativo, por permitir el acceso de los manifestantes afectos al Gobierno, para impedir que se celebrara la sesión.
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