Realizarán estudios de ADN a perro momificado hallado en Coahuila

Según el INAH se trata de uno de los pocos ejemplares de cánidos momificados en el mundo, sólo se conocen casos similares en Perú y Egipto.

En el año de en 1953, en Saltillo Coahuila, fue hallado un perro momificado con una antigüedad de más de mil años, en la Cueva de la Candelaria, de la región lagunera de Coahuila, será sometido a estudios y a pruebas de ADN. La pieza fue integrada a los acervos arqueológicos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), tras permanecer por varios años en manos de particulares, junto con 2,500 materiales arqueológicos encontrados en dicha caverna en 1953. El arqueólogo Yuri de la Rosa explicó que "es el primer can momificado que se tiene en un contexto arqueológico, en este caso una momificación natural, por los agentes del desierto, las condiciones de sequedad hicieron que la piel se secara y se adhiriera a los huesos". El perro momificado, de aproximadamente 42 cm de largo y 22 de alto, guarda la posición de estar echado, recostado sobre su lado derecho, y con la cabeza y cuello flexionados hacia abajo. De acuerdo con los especialistas, algunos de los objetos rescatados serán sometidos a procesos de conservación, restauración y estudios para conocer, tanto su antigüedad y cómo eran las costumbres funerarias de aquel entonces. Yuri de la Rosa agregó que "los distintos tipos de estudios que se han hecho de los materiales, no solamente de la colección sino de las otras partes del acervo de la cueva de la Candelaria, tienen una cronología aproximada del 800 D.C. al 1200 D.C., más o menos es el rango en el que fue utilizada la cueva de la Candelaria por los laguneros". Dicho hallazgo genera expectativa sobre el conocimiento de la arqueología del norte de México, pues por un lado refuerza la idea de la colocación de perros como acompañantes dentro de las tradiciones funerarias, y por el otro, la posibilidad de domesticación de este animal. Toda la información de los materiales, así como los resultados de los estudios serán incorporados al Sistema Único de Registro Público de Monumentos y Zonas Arqueológicos del INAH.