En el municipio de Chimalhuacán, Estado de México, la supervisora de la zona P208 Liliana Cecilia Gonzales Vanegas y el director José Andrés Genis Vargas cerraron los accesos a la escuela primaria Carmen Armenta, por lo que más de 200 alumnos no tienen clases.
Motivo por el que los padres de familia acusan malversación de fondos, hostigamiento y violencia física en la dirección, aseguran que se valen de tutores del turno vespertino y del director del plantel para permanecer en la impunidad.
Agregaron que al interior del plantel la supervisora tiene una oficina acondicionada como departamento de lujo con equipo de entretenimiento, sistema de televisión de paga, baño con loseta, cocina integral con refrigerador, sala y comedor, horno de microondas, alacena, bodega y estacionamiento exclusivo, por lo que exigieron que estas presuntas anomalías deben ser investigadas por la autoridad estatal correspondiente.
María Paz Mendoza Sánchez, directora de Educación del gobierno municipal, hizo un llamado a la Subdirección Regional de Educación Básica estatal y al gobernador mexiquense Eruviel Ávila Villegas para que atiendan y resuelvan el conflicto de la escuela primaria Carmen Armenta, porque se está atentando contra el derecho a la educación de los alumnos.
Mendoza Sánchez resaltó que están preocupados por la seguridad de la comunidad estudiantil y los padres de familia, exhortamos a la Secretaría de Educación estatal para que a la brevedad investigue y en caso de ser necesario sancione presuntas conductas ilícitas por parte autoridades del plantel.
Los padres advirtieron que si las autoridades escolares no abren la escuela para que sus hijos reciban clases, ellos tomarán el plantel educativo y no dejarán que ingresen directivos y maestros hasta que la Secretaría de Educación les mande un nueva plantilla de maestros.
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