Con los ojos vendados y las manos atadas, María Leonor Villa Ortuño explica los vínculos de su yerno, José Luis Abarca González, con el grupo criminal de los Guerreros Unidos.
Abarca González, fue elegido como presidente municipal de Iguala en 2012 y hoy es prófugo de la justicia, pues después de solicitar una licencia por 30 días, desapareció.
La huida del presidente municipal por el Partido de la Revolución Democrática (PDR) se dio días después de la muerte de 3 estudiantes y la desaparición de 43 normalistas en la comunidad a su cargo.
Sin embargo, no es la primera vez que se le asocia al crimen organizado. En 2009, la revista Proceso identificó a Mario Pineda Villa, cuñado de Abarca, como operador de los Beltrán Leyva.
Según consta en la averiguación previa PGR/SIEDO/UEIDCS/0241/2008, Pineda Villa fungía como enlace entre altos funcionarios de la entonces Subprocuraduría de Investigación Especializada de Delincuencia Organizada (SIEDO) y los hermanos Beltrán Leyva.
A cambio de información sobre el avance de las investigaciones en su contra, los Beltrán Leyva ofrecían pagos mayores a 450 mil dólares mensuales para los funcionarios.
Otro de los cuñados de Abarca, conocido como “El Borrado”, fue arraigado por 40 días en mayo del 2009 acusado de ser el principal operador de los Beltrán Leyva en la entidad. Salomón Pineda Villa, también cuñado de Abarca, fue procesado en la misma averiguación.
Pese a eso, Abarca ganó la presidencia de Iguala y su esposa continúa acompañándolo. En la ceremonia donde solicitó licencia por 30 días, María de los ángeles Pineda Villa lo acompañaba.
En el video difundido por el Blog del Narco se escucha a la suegra de Abarca explicar cómo sus hijos patrocinaron la candidatura de ángel Aguirre como gobernador de Guerrero.
Leonor Villa explica cómo los comandantes y policías municipales son completamente controlados por el cártel de los Guerreros Unidos.
Publicación de Congreso Nacional Ciudadano Houston.
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