La muerte de ocho narcotraficantes en un enfrentamiento que inició con el ataque de los delincuentes contra una patrulla de la Secretaría de Marina (SEMAR) puso en evidencia la presencia del crimen organizado en la Ciudad de México, cuyo Gobierno ha negado.
El tiroteo en un barrio de Tláhuac dejó un saldo de ocho presuntos delincuentes muertos, incluido su presunto líder, Felipe de Jesús “N”, alias “El Ojos”, líder del llamado cartel de Tláhuac que supuestamente se dedicaba a distribuir droga en Ciudad Universitaria. Los delincuentes intentaron frustrar el operativo al incendiar camiones, para bloquear calles.
La de ayer fue la primera vez que la Ciudad de México padece un hecho delictivo como éste y contradice las declaraciones del jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, quien aseguraba que la capital del país estaba exenta de la delincuencia organizada, particularmente de carteles de la droga.
La Marina aseguró que el enfrentamiento en Tláhuac comenzó cuando delincuentes dispararon contra una patrulla de la institución que acompañaba un operativo de la Procuraduría General de la República (PGR) y de la Policía Federal.
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