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Los líderes de la República Checa, Hungría y Eslovaquia se oponen al posible empeoramiento de la situación económica que pueden causar nuevas sanciones contra Rusia y acusan a Europa Occidental de hipocresía en relación a la situación en Ucrania.
"Los países de Europa occidental continúan firmando acuerdos con empresas rusas, a pesar de estar amenazando con nuevas sanciones al Gobierno de Moscú, y es una hipocresía", dijo el primer ministro eslovaco, Robert Fico, durante una conferencia en Bratislava, según cita el portal informativo Bloomberg.
"Hablamos de la unidad, pero Francia tiene previsto vender a Rusia buques de guerra. Estamos hablando de la forma de garantizar la seguridad energética de Ucrania, y tomamos las decisiones claves en el Consejo de la UE mientras que Gazprom firma contratos sobre el gasoducto South Stream con empresas alemanas, francesas e italianas", dijo Fico.
El primer ministro checo, Bohuslav Sobotka, y el húngaro, Viktor Orban, también han declarado que no quieren perder oportunidades de comercio con Rusia. Al mismo tiempo, el primer ministro de Polonia, Donald Tusk, expresó un punto de vista diferente y afirmó que la EU debería hablar con una sola voz en el tema de las sanciones contra Rusia y compartir sus costes.
De acuerdo con el portal informativo, los países de Europa del Este que también son miembros de la UE, quieren que sus vecinos occidentales más ricos compartan con ellos los costes económicos que se derivan de la aplicación de sanciones contra Rusia. Eslovaquia, República Checa y Hungría, por su parte, también dependen de Rusia en materia del suministro de gas y exigen garantías en este ámbito.
Tales declaraciones de los líderes del Este de Europa refuerzan la brecha que ya existente entre los Estados occidentales, en particular en materia del incremento de gastos en defensa. Así, entre los países que se oponen al aumento del gasto en armamento están Alemania, Francia, Italia y España.
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