De igual forma, el próximo mes tienen previsto acudir a una marcha multitudinaria en Washington.
Nikolas Cruz, ex-estudiante del centro, fue acusado de 17 cargos de asesinato por la balacera del pasado miércoles.
Chris Grady, fue uno de los chicos que sobrevivió al tiroteo en la escuela secundaria, dijo que cuando un hombre armado abrió fuego en su escuela, se acurrucó en su aula, escuchó los disparos de cerca y que lo que sintió no fue miedo, sino ira.
La furia de Grady creció un día después del tiroteo, cuando escuchó la noticia de que el Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), no había dado seguimiento a la información sobre el ex-alumno que, según la policía, mató a tiros a 14 estudiantes y tres miembros del personal con un rifle estilo AR-15, que había comprado legalmente pese a tener antecedentes de problemas de salud mental.
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