Delincuentes no iban a rescatar, sino a matar a cómplice

Cruz Roja exige captura de bandidos y exige respeto al principio de imparcialidad que tiene como institución.

Por: David Esquivel
Tlalnepantla.- Edoméx.- No era rescate sino ejecución la que iban a perpetrar dos sujetos empistolados, quienes la madrugada de este miércoles incursionaron en la clínica de la Cruz Roja para matar a uno de sus cómplices, con quien tenía diferencias por la venta de autos y el reparto de dineros que los latrocinios les dejaban.  La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) informó que fue identificado uno de los dos sujetos que se liaron a balazos con policías municipales locales dentro de la clínica.
Alejandro Gómez Sánchez, titular de la FGJEM, en un comunicado de prensa informó que una de las principales líneas de investigación, es que los sujetos armados que ingresaron a la Cruz Roja tenían como objetivo privar de la vida a uno de sus cómplices con quien tenían diferencias.
Ya en entrevista afirmó que el sujeto hospitalizado refiere que "tuvo diferencias con otros imputados por la venta de unos vehículos robados, por lo que ya sabía que era muy probable que lo quisieran matar". El fiscal informó que el custodiado era atendido en la Cruz Roja desde el 28 de septiembre reciente, donde ingresó por diversas lesiones de arma de fuego, tras participar en una balacera en Tlalnepantla.
Cabe recordar que la madrugada del miércoles, un policía municipal falleció y resultaron heridos una enfermera y un oficial cuando los dos hombres intentaron llegar hasta donde se encontraba el hospitalizado. Los dos policías municipales fueron trasladados al hospital estatal del Instituto de Salud del Estado de México y Municipios (Isemym), ubicado en los Reyes Iztacala, donde uno de los oficiales falleció.
Por su parte la Cruz Roja, Delegación Toluca, en un comunicado de prensa exigió que se aclaren los hechos y se capture a los delincuentes que violaron los tratados internacionales, según los cuales, hospitales y centros médicos así como lugares con insignias de la Cruz Roja, no deben ser objetivos de ataques armados de ninguna índole, aun en tiempos de guerra; pero, al parecer los delincuentes de marras ignoran estos estatutos.