UE da ultimátum de 2 días a Rusia para retirar a sus fuerzas de Crimea

La Unión Europea (UE) ha dado un plazo de 48 horas a Rusia para que retire a sus fuerzas desplegadas en la península sureña de Crimea.

En una declaración firmada tras la reunión organizada de urgencia en Bruselas, capital belga, los miembros del bloque advirtieron el lunes que si Rusia no frena su avance en Crimea antes del jueves, se enfrentará a medidas en su contra por el bloque. De acuerdo con la citada declaración, en el caso de que el Kremlin ignore esta fecha límite, los 28 miembros de la UE, se reunirán el jueves en una "cumbre extraordinaria" para discutir la posibilidad de suspender las conversaciones existentes con Moscú en materia de visados y comercio. Estas amenazas se suman a las ya lanzadas por varios países occidentales, encabezados por Estados Unidos que han advertido a Rusia con un aislamiento político y económico y su expulsión del G8 (EE.UU., Canadá, Francia, Alemania, Italia, el Reino Unido, Japón). Asimismo, el Grupo de los Siete (G7) - grandes países industrializados declaró el lunes la suspensión de sus preparativos para la venidera cumbre del G8, que está programada para el próximo junio en la ciudad rusa de Sochi. "Nosotros, los líderes de Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, el Reino Unido y Estados Unidos, el presidente del Consejo Europeo y el presidente de la Comisión Europea nos unimos hoy para condenar la clara violación por parte de la Federación Rusa de la soberanía e integridad territorial de Ucrania", indica el comunicado del G7. Por su parte, Rusia ha afirmado que la decisión del G7 carece de fundamento y contradice los principios de cooperación constructiva en este formato que favorecen los intereses del desarrollo, la estabilidad mundial y el combate a los desafíos y amenazas transfronterizos. Desde el surgimiento de la crisis en la península sureña de Crimea que no reconoce la legitimidad del nuevo poder en Ucrania, Moscú ha defendido su gestión en este país al expresar que "ultranacionalistas ucranianos amenazan las vidas y los intereses regionales de los rusos y de las poblaciones rusohablantes.