Procesan a ex jefe antidrogas argentino por desviar efedrina a México

EFE | La justicia argentina procesó a José Ramón Granero, exsecretario argentino de la Lucha contra el Narcotráfico, por haber participado en el desvío de 40.9 toneladas de efedrina que fueron a parar a manos de narcotraficantes mexicanos. La jueza María Servini de Cubría procesó también, en un extenso fallo de 164 páginas consultado por Notimex, a otros cinco exfuncionarios de la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar) que presidía Granero. “Quedó ampliamente demostrado, en distintos procesos judiciales, que las importaciones al país de efedrina tenían como último destino la República de México, ya sea como materia prima en sí o ya producida la metanfetamina”, señaló el documento. La investigación probó que de los 47 mil 625 kilos de efedrina que Argentina importó de 2004 a 2008, 40 mil 971 fueron desviados a manos de condenados, procesados o denunciados por maniobras de narcotráfico. El fallo recordó los juicios en los que el empresario mexicano Jesús Martínez Espinosa y otros ocho ciudadanos de ese país fueron condenados por haber montado el primer laboratorio de metanfetaminas de Argentina, el cual fue descubierto en julio de 2008. También citó el caso de Mario Roberto Segovia, un argentino que en 2012 fue condenado por contrabando agravado ya que envió de manera ilegal nueve mil 800 kilos de efedrina a México. Gabriel Yusef Abud y Julio de Orué son los otros funcionarios de primer nivel de la Sedronar que fueron imputados como cómplices del tráfico de efedrina y seudoefedrina, sustancias químicas con las que se producen las metanfetaminas. Granero, Abud y Orué negaron los cargos y afirmaron que la Sedronar no contaba con el presupuesto ni la infraestructura necesaria para controlar la importación de efedrina, lo que fue desestimado por la jueza ya que ésa era precisamente su obligación como funcionarios. El fallo dejó en claro que no hay modo de que los imputados no se dieran cuenta de que en sólo cuatro años la Secretaría había permitido un incremento injustificado de importación de efedrina de mil 363 por ciento. De 1999 a 2003, Argentina importó entre mil 200 y mil 500 kilos anuales del precursor químico, pero tan sólo en 2007 ingresaron 20 mil kilos, cantidad que superó, por mucho, los requerimientos de la industria farmacéutica local que usa la efedrina para fabricar medicamentos. La jueza advirtió que la Sedronar no hizo caso alguno de la alerta internacional que se emitió en 2008, cuando el gobierno mexicano cerró su mercado a la importación de efedrina y seudoefedrina, lo que provocó que los cárteles buscaran la sustancia en otros países. “México con el fin de evitar el desvío de efedrina y pseudoefedrina para fines ilícitos, desde 2003, y con mayor énfasis desde 2005, venia adoptando medidas y diversas disposiciones en materia de gestión y control”, afirmó.